No se le puede pedir más de lo que da a esta película, por que ya sabíamos de antemano lo que veríamos, teniendo en cuenta el reparto y la temática de la película. Sin dar muchas explicaciones es exactamente lo que esperaba, cine correctamente fabricado en Hollywood, para pasar el rato una tarde sin demasiadas complicaciones ni artificios, así que podemos decir que cumple con su cometido.
Mark Wahlberg interpreta un papel de chico malote que siempre ha estado metido en problemas pero que busca su redención para no perjudicar a su familia y que tiene que realizar un último trabajo bajo coacción debido a la amenaza que sufre su familia, las buenas intenciones nunca le faltan al bueno de Mark, de lo mejor de reparto ya que este papel se lo sabe de memoria.
El resto de reparto es más de lo mismo, se lo saben de memoria Giovanni Ribisi habrá perdido la cuenta de las veces que ha interpretado el mismo papel que en esta película.
Kate Beckinsale no necesita esforzarse mucho, ni lo hace para interpretar a la compañera sentimental de Mark y madre de sus hijos, la cual no sale de los típicos clichés hollywoodienses, de madre chony dispuesta a hacer cualquier cosa por mantener a salvo a sus vástagos.
Poco más, ni bueno ni malo se puede decir de esta película que no pasara a la historia, pero que nos entretendrá un rato, tampoco se puede pedir que todo lo que se produzca sea una obra maestra.
Nota: 5.5
Momento para verla: Cuando queramos pasar el rato sin pensar demasiado, ni liarnos con experimentos, pisamos sobre seguro.
Abrazos, Eka.
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